PUMAS CAMPEON VENCIENDO A CHIVAS EN PENALES

**Gianna1978** Dom Mayo 17, 2009 4:02 am

MÉXICO, DF.- Después de 13 años, Pumas de la UNAM se proclamó monarca del futbol mexicano al adjudicarse el título del Campeonato Clausura 2004, en cuya final derrotó en penaltys 5-4 (6-5 global) al Guadalajara en el Estadio Olímpico Universitario.

Pumas y Chivas empataron sin goles durante los 90 minutos del partido de vuelta (igualaron 1-1 en el de ida el jueves anterior en el Estadio Jalisco) y 30 más de tiempos extra y el título se tuvo que definir desde el manchón de penalty, serie en la que ambos equipos demostraron capacidad para definir de manera correcta.

Este fue el cuarto título de liga para Pumas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), que festejó así su 50 aniversario y el primero para Hugo Sánchez Márquez como técnico.

Jaime Lozano fue el encargado de abrir por la UNAM y con disparo al lado izquierdo de Oswaldo Sánchez, que se lanzó al sector contrario, le dio la ventaja a Pumas.

Adolfo Bautista emparejó con tiro al rincón, pero Joaquín del Olmo, con su gran experiencia, le devolvió la ventaja a los Pumas, para que Manuel Sol empatara enseguida a dos de lado de Chivas.

El capitán del equipo universitario, Joaquín Beltrán, con toque colocado marcó el 3-2 y Juan Francisco Palencia emparejó los cartones. Francisco Fonseca acertó a continuación y festejó enfrente de Oswaldo Sánchez el 4-3, sólo que Omar Bravo con potencia igualó.

El brasileño Aílton da Silva, con un toque colocado, engañó a Oswaldo Sánchez para el 5-4 y en ese momento fue cuando el destino de las Chivas quedó en los pies de Rafael Medina.

En ese instante, la respiración de millones de aficionados se contuvo y Medina, que había entrado de cambio en la segunda parte, mandó su disparo por encima del larguero, para que así Pumas se levantara con el título.

En lo que fue el juego, la tensión no permitió a los dos equipos asentarse por completo sobre el terreno. Los jugadores de Pumas y Chivas no terminaban por soltarse, lo que derivó en un juego que por momentos fue aburrido en sus primeros 45 minutos.

Tanto locales como visitantes estaban más preocupados porque no les metieran un gol que por ir al frente. Pumas tuvo un mejor inicio, después Chivas inclinó la balanza con el transcurso de los minutos, pero hacia el final una vez más los de casa recuperaron el dominio. Con la inclusión desde el inicio del delantero argentino Bruno Marioni se pudo pensar que Pumas tendría mayor peso específico al frente, pero el atacante sudamericano se veía inseguro, temeroso de volverse a lesionar del muslo izquierdo.

La escuadra auriazul quiso ser más ofensiva y por el sector de la izquierda el brasileño Aílton fue el jugador que intentó desequilibrar. El atacante sudamericano no previó que enfrente tendría a un férreo defensa como Salvador Carmona, que no le permitió hacer mucho.

Francisco Fonseca fue el corazón de la ofensiva felina, pese a tener menos de una semana de haber sido operado de la clavícula izquierda, "Kikín" peleó todos los balones con el corazón y fue el hombre que más inquietó al rival.

Mientras que Chivas salió igual que en el partido de ida el pasado jueves, es decir, con cuatro hombres netamente ofensivos. Con Omar Bravo y Alberto Medina intercambiando posiciones en las bandas, Adolfo Bautista a la caza del balón y Francisco Palencia se incorporaba desde atrás.

En esta ocasión, Palencia, sin olvidarse de atacar, tuvo una mayor labor de sacrificio y ayudó en el medio campo a Manuel Sol en el trabajo de recuperación.

Pocos fueron los arribos de peligro en ambas porterías, la más clara al minuto 39 en un grave error de la zaga de Chivas, que dejó botar un balón a segundo poste a la llegada de Marioni, quien con la cabeza alcanzó a rematar, pero muy bien, como siempre, Oswaldo Sánchez estuvo atento para salvar su meta en la línea de gol.

A su vez, Chivas fue prácticamente inoperante al frente y pese a que por momentos tuvo una mayor posesión de balón careció de potencia y profundidad: El Bofo muy bien marcado, Bravo sin poder desbordar por la derecha y el único que pudo hacer algo fue Alberto Medina, quien en varias ocasiones se llevó la marca de Israel Castro.

La segunda parte del partido fue muy similar a la primera, las dos escuadras precavidas, aunque con un Pumas con mayor deseo de ir al frente, caso contrario de Chivas, que apostó por el contragolpe.

Con el firme objetivo de darle mayor fuerza a su ataque, el técnico Hugo Sánchez ordenó el ingreso de Ismael Íñiguez por un disminuido Marioni. Con esta modificación Sánchez Márquez intentó que la habilidad del delantero universitario desequilibrara a la zaga tapatía.

Asimismo, el estratega holandés Hans Westerhoff sacó a Alberto Medina por Rafael Medina, para darle mayor fuerza a su media cancha, que estaba siendo superada, un cambio que a la postre sería decisivo en el resultado final.

A nueve minutos del final, Palencia cerca estuvo de darle la victoria a su equipo, pero no alcanzó a realizar un buen contacto con la cabeza y su remate se fue a un lado de la portería de Bernal, quien ya estaba fuera de la jugada.

La respuesta universitaria vino instantes después en un disparo a la entrada del área por parte del brasileño Leandro Augusto, pero Oswaldo Sánchez recostó para detener el envío, lo que fue la última jugada de peligro de los 90 minutos reglamentarios y que obligó a la disputa de tiempo extra para definir al monarca.

El cansancio en los dos equipos era más que evidente, la intensidad era la misma, pero la velocidad era menor, con un Pumas con mayor deseo de ganar y unas Chivas que apostaron en definitiva por los penaltys.

Los de sangre azul y piel dorada intentaron por todos los medios el gol de la victoria, y la más clara que tuvieron se dio en un disparo de Fonseca que pasó "rasurando" el poste derecho.

El último minuto del juego trajo consigo la jugada que sin duda definió el partido, pues en uno de los pocos intentos de Guadalajara cerca estuvo de darle la victoria y el título a su equipo. La jugada se originó en un contragolpe en el que Palencia por la izquierda sirvió muy bien al sector contrario a la llegada de Rafael Medina, quien de volea prendió el balón que llevaba dirección de gol, pero cuando millones de aficionados del Guadalajara coreaban la anotación apareció la figura de Bernal, que en la línea detuvo.

Fue la última jugada del tiempo extra, por lo que el campeón del futbol mexicano se tuvo que definir en una reñida tanda de penaltys llena de dramatismo, en la que Medina, quien ingresó de cambio en busca de ser la solución para su equipo, fue el "villano" al fallar el quinto y último disparo.

En esta ocasión el arbitraje no influyó a favor de ningún equipo, pues Gilberto Alcalá tuvo una actuación solvente y limpia.

Fue capaz de resolver muy bien todas las jugadas complicadas.

Amonestó a Francisco Fonseca (40’) por Pumas y a Omar Bravo (34’), Francisco Javier Rodríguez (40’), Oswaldo Sánchez (40’) y Manuel Sol (102’) por Chivas.

Alineaciones: Pumas.- Sergio Bernal, Israel Castro, Joaquín Beltrán, Darío Verón, Jaime Lozano, Gerardo Galindo, Leandro Augusto (Joaquín del Olmo, 95’), José Luis López (Moctezuma Serrato, 110’), Aílton da Silva, Francisco Fonseca y Bruno Marioni (Ismael Íñiguez, 66’). DT Hugo Sánchez. Guadalajara.- Oswaldo Sánchez, Héctor Reinoso, Ramón Morales (Ramón Ramírez, 74’), Salvador Carmona, Carlos Salcido, Francisco Javier Rodríguez, Manuel Sol, Alberto Medina (Rafael Medina, 77), Juan Francisco Palencia, Adolfo Bautista y Omar Bravo. DT Hans Westerhoff (HOL).